lunes, 22 de febrero de 2016

Los "grupos de presión" al abordaje de las redes sociales

    Desde hace tiempo la crispación política y ciudadana se instaló en nuestras vidas y lo hizo sin dejar ningún hueco libre del que escapar. Aquellos espacios de expansión y divertimento que son las redes sociales, empezaron a convertirse en cualquier cosa menos sociales. Y es que no hay día que veas a unos y a otros, perfectamente organizados eso sí, esperando la señal para empezar la carnicería.
       El más patente, dónde se puede observar el combate cuerpo a cuerpo es twitter. Los detectas al arriar su bandera, los hagtags, y empiezas a ver el combate. Siempre los mismos perfiles. Cualquier noticia del oponente político sirve de pretexto para sacudir estopa a diestro y siniestro. Y como se le ocurra a alguien disentir de la opinión de la manada borreguil, le tratan de apestado social, fascista-últimamente muy de moda por cierto, aunque algunos no sepan siquiera su significado- o perroflauta, o piojoso ...o cualquier insulto que se les venga a su enturbiado cerebro, aunque el comentario esté desprovisto de toda consideración ideológica. Pero es que en estos grupos de letanía sectaria es como un mantra aquello de si no estás conmigo estás contra mí
     Manipulan las noticias, día sí y día también. Y mucho más si les perjudica, se dedican a justificar las tropelías de sus amados líderes con el consabido y desgastado...y tú más. Y es que no deja de ser siempre el mismo cuento. 
      Hace unos días uno de esos grupos creó un hastag de apoyo a cierto personaje político y fueron tan descaradamente estúpidos que utilizaron lo que se conoce como "trending boots", que no es otra cosa que crear un hastag para que un determinado tema o reivindicación se convierta en trending topic a nivel nacional,  y claro eso implica utilizar perfiles falsos, con lo cual esta vez la cosa quedó excesivamente chapucera. Aunque algún cenutrio se jactaba del gran apoyo que estaban teniendo...¡Pobre diablo!

    En el resto de redes sociales como Facebook o Google plus la estrategia es intoxicar la página del oponente político con comentarios de todo tipo, se trata de hacerse pasar incluso por uno que pasaba por allí y deja caer su queja, pero claro son cazados al momento. El caso es que las redes sociales hoy por hoy están infectadas de este virus de la crispación política y no hay forma de aliviar al enfermo. Yo espero que se pase pronto y estos políticos de campo, o de redes se vayan a pastar a otro sitio, porque la verdad son muy cansinos y llegan a hartar hasta al más paciente... Lo dicho,  señores políticos de medio pelo y pelucón tomen su bajel pirata y aborden la próxima isla desierta con sus insultos, mentiras y crispación. Jueguen allí a darse en la cabeza con los cocoteros y por favor...no vuelvan.